La bodega municipal La Indómita completó este viernes el pago a los 531 productores del distrito que se beneficiaron con la primera producción de vino de la bodega municipal La Indómita.
Fiambalá fue la zona que mejor pagó la uva cereza en el país.
Con un precio de 30 pesos el kilo de uva, Fiambalá se posicionó como la zona vitivinícola que mejor pagó la uva cereza o criolla, superando a los polos vitivinícolas de Mendoza y San Juan, en casi 2 pesos.
La bodega recibió 3 millones de kilos de uva, lo que les generó a los productores vitivinícolas locales más de 100 millones de pesos.
La Indómita cerró su producción con 2.300.000 litros de vino. Este año la bodega amplió su capacidad por 10, con un incremento de 125 mil litros a 1.025.000 litros.
Teniendo en cuenta la cantidad de kilos de uva que aportaron los productores de todo el distrito, se alcanzó una rotación de litros de casi 3 veces la capacidad de almacenamiento, lo que redundó en los 2.300.000 litros de vino que se logró producir.
La intendenta Roxana Paulón, expresó: “Quiero agradecerles a todos los productores que confiaron en La Indómita. Es un compromiso que como gestión tomamos con los productores locales, poner en valor su trabajo y trabajar para desarrollar la producción vitivinícola. En un año estamos viviendo un crecimiento exponencial, y sin dudas La Indómita marca un antes y después para el sector. Como Estado, la bodega es una herramienta de crecimiento y desarrollo que ponemos en manos de los productores para que Fiambalá siga creciendo como lo ha hecho en estos años”, concluyó Roxana.
Ubicada en Medanitos, a 21 km de Fiambalá, La Indómita se abastece de la producción vitícola de los productores de la zona, con terruños de entre 1500 y 2000 msnm.
Construida con mano de obra local, desde su inauguración hace un año, La Indómita puso en valor la producción vitivinícola local, creando un fondo rotario con ayuda del Gobierno Provincial que permitió una reparación histórica del precio de la uva a los productores locales.
Además se comenzó a trabajar con el Instituto Nacional Vitivinícola para el saneamiento de los viñedos y la certificación de origen para hacer competitiva la actividad en los mercados nacionales e internacionales.