La obra comprende la ejecución de 450 metros lineales de conductos de Polietileno de Alta Densidad (Pead) por Duvivier, que desemboca al conducto de hormigón armado de 120 metros lineales ejecutado en el tramo de Fortín Tapenagá y avenida Soberanía Nacional.

Gustavo contó que este proyecto forma parte de la planificación para brindar una solución hídrica a una zona muy populosa de la Ciudad por medios de obras estructurales de desagües pluviales y a la vez ejecutar corredores viales urbanos. “Por primera vez se ejecuta una obra estratégica en un barrio de Resistencia y no en el centro. Y la misma se realiza en el corazón de Villa Libertad, un lugar histórico y emblemático de la Ciudad”, agregó.

En este sentido, expresó: “No ejecutaremos pavimento sin desagües, ya que lo primero que tenemos que resolver en una ciudad con históricas complicaciones por la acumulación de agua de lluvia, es la implementación de un sistema de desagües troncales o estructurales”.

Solución histórica para Villa Libertad

Esta importante obra para la zona sur de la Ciudad, incluida en el Plan Integral de Infraestructura, se encuentra avanzando a paso firme y permitirá solucionar la problemática histórica que se genera en el canal a cielo abierto del riacho Arazá, que constantemente es obstruido por la acumulación de residuos y no permite el correcto paso del agua de lluvia de toda la cuenca.

Gustavo también explicó que la concreción de estos trabajos es fundamental para avanzar con la próxima etapa de 650 metros de pavimento urbano por la calle Fortín Rivadavia, que completará el corredor vial de más de dos kilómetros entre las avenidas Alberdi y Chaco, que conectará los barrios Villa El Dorado, Villa Palermo I, Villa Libertad, Jardín y Güiraldes.

Acompañaron al jefe comunal en la recorrida el secretario de Planificación Infraestructura y Ambiente, Guillermo Monzón; el subsecretario de Arquitectura e Ingeniería, Fernando Porfirio; y el director general de Ingeniería, Julio Stéfani.

Detalles del proyecto ejecutado por administración

El conducto en ejecución es de sección circular y está compuesto por dos y tres baterías de caños de 1.000 milímetros de diámetro, con sus respectivas cámaras de inspección y limpieza. Además, cuenta con sumideros de cuneta con las correspondientes conexiones de vinculación al conducto. Su destino final será el canal de la avenida Soberanía Nacional, receptor de los desagües pluviales de la zona sur de la Ciudad.

La chacra 206 anteriormente estaba atravesada por el riacho Arazá, el cual fue rellenado paulatinamente debido al avance de la urbanización, generando serios problemas de anegamientos, por lo que estos trabajos permitirán un mejor escurrimiento de las aguas pluviales hacia el canal receptor.

Esta obra aliviará 35 hectáreas de la cuenca de aporte de aguas de lluvia y permitirá además continuar la ejecución del pavimento sobre calle Fortín Rivadavia, desde calle Lisandro de la Torre hasta avenida Chaco.