La pequeña localidad ubicada en el corazón de las Sierras Centrales fue elegida por el Ministerio de Turismo y Deportes de la Nación para competir para ser una de las más lindas del planeta en el concurso de la Organización Mundial del Turismo de las Naciones Unidas.
La Carolina en camino a ser elegida uno de los pueblos más lindos del mundo
Con sus 1200 habitantes, es uno de los pueblos ubicados a mayor altura sobre el nivel del mar en Cuyo, resguardo de la historia de los primeros buscadores de oro de Argentina y conserva su legado en la memoria viva de su gente.
El Gobierno de la provincia a través de la Secretaría de Turismo postuló a la localidad serrana en este concurso que es una iniciativa global para destacar los pueblos en los que el turismo preserva la cultura y las tradiciones, celebra la diversidad, genera oportunidades y protege la biodiversidad.
La Carolina participa de la nueva edición del “The Best Tourism Villages by UNWTO” (mejores pueblos para el turismo de la Organización Mundial del Turismo de las Naciones Unidas, por sus siglas en inglés). Hasta el 23 de junio, la OMT recibió las solicitudes de los pueblos de los cinco continentes que buscan ser reconocidos como uno de los mejores del mundo, cuyo galardón tiene por objetivo hacer del turismo un motor del desarrollo y bienestar rural. Los ganadores se anunciarán oficialmente a finales de 2023.
El objetivo del concurso
– Convertir el turismo en uno de los motores del desarrollo rural y el bienestar de las comunidades.
– Comprometerse con la sostenibilidad en todos sus aspectos: económico, social y ambiental.
– Ganar visibilidad y reconocimiento internacional como ejemplo destacado de destino de turismo rural.
– Formar parte de una red mundial de destinos rurales.
– Reducir las desigualdades regionales en ingresos y desarrollo.
– Luchar contra el éxodo rural y la despoblación.
– Promover la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres y los jóvenes.
– Potenciar la educación y la adquisición de destrezas.
– Promover la transformación rural y fortalecer la capacidad de tracción.
– Reforzar la gobernanza a varios niveles, las asociaciones y la participación activa de las comunidades (colaboración público-privada-comunitaria).
– Mejorar la conectividad, la infraestructura, el acceso a las finanzas y la inversión.
– Impulsar la innovación y la digitalización.
– Innovar en el desarrollo de productos y la integración de la cadena de valor.
– Promover la relación entre los sistemas alimentarios sostenibles, equitativos y resilientes y el turismo para preservar la biodiversidad, la diversidad agrícola, el patrimonio cultural y la gastronomía local.
– Fomentar la conservación de los recursos naturales y culturales.
– Promover prácticas sostenibles orientadas a un uso más eficiente de los recursos y la reducción de las emisiones y de los residuos.
La Carolina: oro y poesía en el corazón de las Sierras de San Luis
Imperdible la visita a la localidad que fue cuna de la fiebre del oro, inicialmente llamada San Antonio de las Invernadas, hasta que en 1794, el virrey Sobremonte, gobernador intendente de Córdoba del Tucumán, lo cambió por su actual “La Carolina” en honor del rey Carlos III de España.
El paso del tiempo mantiene su semblanza dorada, con brillos de transparencia, las sierras que acercan al cielo, el susurro del agua de los arroyos que evoca las historias y sueños de los mineros.
Un camino empedrado sube y se pierde entre los cerros transportando a tiempos lejanos. El pueblo es una larga callecita rústica empedrada, rodeada de casas de piedra que conservan el estilo colonial y la nostalgia de haber sido cuna de los míticos buscadores de oro, fiebre que sólo dejó bocaminas, excavaciones y viejas historias de mineros.
La gastronomía tiene un rol preponderante con sabores y productos que despiertan los sentidos de los más exquisitos paladares. Platos regionales que se sustentan en costumbres transmitidas de generación en generación.
Hoy, convertido en uno de los principales destinos turísticos de la provincia, el lugar atrae a grandes y chicos por sus opciones: expediciones al interior de las minas, visitas a la Iglesia de Piedra, cabalgatas, subida al cerro Tomolasta, recorrida por la gruta de Inti Huasi, la visita a Casa Piedra Pintada con sus pinturas rupestres y la histórica Casa de Juan Crisóstomo Lafinur, Museo de la Poesía Manuscrita.