Con gran éxito de convocatoria, se llevó a cabo el “Bus del Regadío”, organizado por la Municipalidad de la Ciudad de Mendoza. Vecinos y turistas disfrutaron una grata experiencia que consistió en un recorrido por destacadas obras hidráulicas de la provincia y atractivos turísticos, el cual fue indicado por un guía anfitrión. El dique Papagallos, dique Cipolletti, Cacheuta y dique Potrerillos fueron los puntos visitados, en los que participantes pudieron conocer las diferentes historias, aprender y guardar sus recuerdos con fotografías.

Durante este circuito se puso en valor el emblemático sistema de canalización del recurso hídrico que posee nuestra provincia, a través de acequias, canales y zanjones, permitiendo, así, conocer y entender, también, las construcciones hidráulicas de gran significancia que existen en Mendoza.

Por lo explicado durante el recorrido, las obras visitadas fueron realizadas por el Departamento General de Irrigación y se dieron por medio de la Ley de Aguas de 1884, pionera en la Argentina, la cual fue impulsada por la figura de Manuel Bermejo. A través de sus antecedentes profesionales, Bermejo supo crear un proyecto sumamente exitoso, que luego se convertiría en ley.

Además de los datos precisados sobre los sistemas y las construcciones, el circuito se encargó de ahondar en la historia y valorizar a los pueblos nativos, quienes, al apostarse en estas tierras, entendieron cuáles eran sus condiciones y utilizaron la metodología de canalización para trabajarla y subsistir. Asimismo, considerando a quienes hoy habitan estos espacios, se puntualizó en la importancia y responsabilidad de cada vecino y vecina a la hora de cuidar la limpieza y mantener cauces y acequias en condiciones.

El conocimiento recopilado a través de las historias relatadas tuvo a diferentes personajes destacados. Uno de ellos fue César Cipolletti y su obra del dique en Luján de Cuyo en 1889, construcción que fue puesta en funcionamiento al servicio de la comunidad en 1890. Otro de los mencionados resultó ser Galileo Vitali, defensor del recurso, quien presentó un proyecto de forestación al gobierno provincial y municipal de la Ciudad de Mendoza en 1926, solicitando la forestación del piedemonte, al entender que la flora actúa como un colchón ante los aludes.

En su tramo final, el “Bus del Regadío” visitó el conocido espacio de Cacheuta, donde los participantes pudieron enterarse sobre detalles de los antecedentes de la Usina Fader. Por último, recorrió el prestigioso dique Potrerillos, el embalse que hoy representa la mayor obra hídrica del país y que es utilizado como reserva de agua para todo el Gran Mendoza.

Las experiencias de los pasajeros que se subieron al Bus del Regadío:

En el recorrido participaron vecinos de la Ciudad, mendocinos y turistas de diferentes partes del país, como Buenos Aires, Córdoba, Entre Ríos y Santiago del Estero. Los mismos expresaron sus sensaciones tras realizar este interesante y entretenido circuito.

Natalia, de Buenos Aires, afirmó: “La verdad que la experiencia que estamos haciendo hoy se pasa de buena. Me encanta que la municipalidad haga estas actividades accesibles, como así también otras que son gratuitas. Ya he ido a varias desde que llegué. Son muy enriquecedoras, porque aprendés un montón de cosas que quizás viniendo solo no podrías saber”.

Sergio, de Córdoba, comentó: “Esta vivencia fue espectacular. Nosotros no conocíamos nada y viniendo solo, generalmente, no se viven estas cosas. Agradecemos a la municipalidad, a la gente que nos acompañó y a todos”. A lo que Cecilia, compañera de viaje, agregó: “Yo no conocía Mendoza, solamente por foto. La verdad es que desde que llegamos ha sido muy lindo todo, incluído el trato de la gente. Este recorrido guiado fue bellísimo. Muchas gracias a la municipalidad de Mendoza. Es para recomendar a todo el mundo que venga a este lugar”.

Brunela, de Buenos Aires, contó: “Vine a pasar acá unos días a Mendoza, tengo a mi familia acá. Ya conozco, pero nunca había hecho este recorrido. Aprendimos un montón de cosas, tanto yo como mi familia. Muy buenos los lugares que se eligieron para visitar y los tiempos dados para poder recorrer. Además, muy accesible y muy buenos los momentos que pudimos pasar en cada uno de los lugares”.