Más de 50.000 personas de Entre Ríos y distintas partes del país recorrieron los espacios y alrededores de la Sala Mayo de la ciudad de Paraná, y disfrutaron de varias actividades relacionadas con los libros y las lecturas en la undécima edición de la Feria del Libro «Paraná lee».

Durante todo el fin de semana largo, las jornadas se iniciaron con talleres de poesía, de podcast y textos dramáticos; «Citas mágicas» como un café con Juan Sasturain, director de la Biblioteca Nacional; una sesión de dibujo con María Luque; y un paseo por el Islote Curupí junto a la poeta Laura Wittner, entre otras.

Asimismo, el primer día fue exclusivo para escuelas y organizaciones sociales, que llegaron con más de 5.000 estudiantes y disfrutaron de la feria y del espacio destinado para ellos.

Allí encontraron mediadores de lectura, un ama de llaves que indicaba el recorrido por espacios «mágicos», música, juegos, talleres, campamento literario.

Sofía Daichman: «Una linda oportunidad para acercarse y alimentar el derecho a la cultura».

Las ventas en la feria más grande del interior del país superaron a las del 2022, explicaron desde la Municipalidad, con muchos «balances positivos y excelentes ventas», dijo Iván, del emprendimiento santafesino ‘Zeppelin rompecabezas’.

«Este año fue diferente: muchas personas vinieron a buscar libros muy específicos, joyitas que teníamos y difíciles de conseguir», destacó Imanol, de la librería Vaporeso, mientras que Pablo Felizia, de Ana Editorial, señaló que vendieron más libros que el año pasado, y eso «ayuda a seguir adelante».

Para Sofía Daichman, de la librería Barco de Papel de Paraná, la Feria «es una fiesta del libro, una linda oportunidad para acercarse y alimentar el derecho a la cultura».

El intendente Dahl señaló que la Feria dinamiza el sector editorial y pone en marcha reas como la turstica gastronmica y comercial

Lectura de poemas a la siesta, espectáculos de poesía y danza, música en vivo, un sector de artesanías y productos regionales, y un patio gastronómico completaban la oferta en la Costanera de la capital entrerriana.

También estuvo la Bibliomóvil del Congreso de la Nación, un ómnibus de doble altura con juegos pedagógicos en computadoras y un espacio de lectura, acondicionado como biblioteca, con más de 5.000 libros.

La Feria fomenta «una visión cultural para que los artistas puedan vivir de sus talentos, y es una política pública que debe ser sostenida en el tiempo, porque dinamiza el sector editorial y pone en marcha áreas como la turística, gastronómica y comercial», resaltó el intendente, Adán Bahl.

En ese sentido, explicó que Paraná «se posiciona como un gran polo» de la industria, y eso, comentó, es «gracias a un gran esfuerzo colectivo, de instituciones, libreros, editoriales y artistas que lo jerarquizaron e hicieron posible».
TELAM