A lo largo de cuatro semanas, 14 escuelas se sumaron a la iniciativa para competir con entusiasmo y creatividad en pos de mostrar su compromiso con la sostenibilidad.
Concurso de Reciclaje Estudiantil: se recolectaron 13 mil kilos
Por segundo año consecutivo, se desarrolló el Concurso de Reciclaje Estudiantil, un programa que busca generar conciencia ambiental entre los jóvenes que asisten a distintos colegios secundarios de la ciudad. A lo largo de cuatro semanas, las 14 escuelas de distintos barrios se sumaron a la iniciativa para competir con entusiasmo y creatividad en pos de mostrar su compromiso con la sostenibilidad.
Para concientizar a través de la acción, teniendo en cuenta el tiempo que tarda cada material en degradarse en el ambiente, se ideó la escala de puntaje conformada de la siguiente manera: por cada kg de cartón será 1 punto; el kg de papel 10 puntos y el kg de plástico 100 puntos.
Los organizadores de este evento aseguraron que el objetivo es netamente educativo, ya que se espera que los estudiantes tomen conciencia sobre la cantidad de residuos que se generan casi de manera permanente y que los mismos pueden ser reciclados.
En total, se juntaron más de 10.000 kilogramos de desechos plásticos que fueron destinados a la integración de la Economía Circular para lograr su reutilización en base a sus propiedades. Esta cifra refleja el impacto positivo que pueden tener los esfuerzos de reciclaje cuando la comunidad trabaja en conjunto por un objetivo común.
Desde el municipio aseguraron que el Concurso de Reciclaje Estudiantil es reflejo del compromiso de los jóvenes en asumir la responsabilidad ambiental. Este empoderamiento otorgado generó un plus al momento de trabajar con cada uno de los establecimientos educativos, ya que se involucraron en esta cruzada, más allá del resultado y los premios en juego.
La definición de los ganadores
A diferencia de la primera edición, en esta oportunidad se sumaron a la propuesta, escuelas que no participan de la Estudiantina. Luego de la charla introductoria en donde se explicaron las bases y condiciones de este evento, se comenzó a trabajar en la modalidad de acopio.
Entre las estrategias más usuales se destacó la generación de ploggin en las inmediaciones de los colegios; un trabajo boca a boca en el interior de la institución con la intención de que todos los cursos junten y se premien entre sí; la consolidación de alianzas con los comercios aledaños y la solicitud de la colaboración con docentes y demás integrantes de la comunidad escolar, entre otros.
En la ocasión, la Escuela Especial de Formación Integral logró el primer puesto, mientras que la Escuela Normal N° 10 lo secundó. Esta definición fue ajustada desde la primera semana, ya que los puntajes fueron muy parejos y aportó una gran dosis de adrenalina entre los concursantes.
En lo que respecta a la categoría sub 600 (en base a la cantidad de estudiantes que integran el colegio), el primer puesto fue para el Instituto Jesús de Nazareth.