En el marco de la ejecución de un proyecto más del Presupuesto Participativo, la Cooperativa de Trabajo Reciclarte que trabaja junto a la Parroquia San Pantaleón de Banda Norte incorporó nuevas herramientas para reforzar el trabajo que busca que los jóvenes se alejen del consumo problemático de sustancias mediante el reciclado y la economía circular
En Río Cuarto el Presupuesto Participativo apoya el desarrollo de proyectos de gran contenido social
Entre los objetos recibidos se destaca un triciclo que les permitirá colectar y transportar el material que juntan de la vía pública.
La entrega estuvo encabezada por el secretario de Gobierno y Participación Ciudadana Guillermo De Rivas, quien valoró el trabajo social, humanitario y de contención que se brinda en el lugar. También ponderó la importancia de que la gente haya acompañado al proyecto con su voto.
“Es muy bueno que los vecinos hayan propuesto el proyecto y que lo hayan votado, pero mejor es que sirva para generar un espacio de contención mediante el reciclado”, consideró. “El Presupuesto Participativo se convirtió en una política de Estado que permite transformar espacios e instituciones y apuntalar proyectos con un fuerte sentido social, como el caso de esta cooperativa que funciona en San Pantaleón”, afirmó el funcionario.
Al respecto, el párroco Carlos Arce destacó la posibilidad que les da el municipio de Río Cuarto y aprovechó la oportunidad para invitar a chicas y chicos a que se sumen a la iniciativa.
“Hoy la cooperativa está compuesta por 15 personas, pero queremos que sean más. En la parroquia contamos con el Hogar de Cristo y aquí recibimos a todos los que vienen y como vienen, es decir sin juzgar, sin criticar y sin condenar. Lo primero que hacemos es abrazarlos y empezamos a acompañarlos”, afirmó el sacerdote.
Paralelamente, Arce comentó que la parroquia San Pantaleón abarca una gran parte de Banda Norte, como el caso de los barrios IPV, Jardín Norte, Padre Mugica y 130 Viviendas, entre otros. “Desde hace seis años tenemos el Hogar de Cristo para acompañar a personas en distintas situaciones, sobre todo en lo que tiene que ver con el consumo problemático. Queremos generar oportunidades, por eso empezamos con talleres de oficios como costura, herrería, carpintería y huerta, entre otros. Después apareció lo de la cooperativa con una muy buena oportunidad para nuestros chicos y chicas, quienes están buscando un proyecto de vida. Las herramientas y el triciclo que recibimos por el Presupuesto Participativo son muy importantes”, acotó el párroco.
Por su parte, Marcos Amaya, referente barrial y miembro del Hogar de Cristo, comentó que la cooperativa se gestó en 2020, pero se activó plenamente el año pasado. “En este caso se decidió ejecutar el proyecto de acuerdo a las necesidades del equipo. La posibilidad de contar con un triciclo nos ayuda mucho en el tema de la movilidad y el recogido de los elementos de reciclado, mientras que la balanza y la zunchadora son clave para armar los fardos, algo fundamental en el proceso de venta de los elementos que se reciclan”, explicó. Cabe mencionar que desde el centro barrial se acompañan a unas 840 personas por semana con múltiples acciones de contención.