Este martes se iniciarán los Laboratorios Ciudadanos para enriquecer los 52 proyectos planteados, y desde el 11 de julio se podrán elegir iniciativas de alto impacto para cada distrito
El municipio retoma el Presupuesto Participativo con una nueva impronta
La Municipalidad de Rosario abrió la convocatoria a los Laboratorios Ciudadanos (LAC) para enriquecer 52 proyectos recogidos en instancias territoriales de participación que surgieron desde más de 600 ámbitos de nuestra ciudad durante los últimos dos años. Estas iniciativas, una vez plasmadas en detalle, serán priorizadas por vecinas y vecinos desde el 11 de julio en el marco del Presupuesto Participativo 2023.
Este martes 28 de junio a las 18 en el Centro Municipal de Distrito Oeste se realizará el primero de los seis encuentros, uno por cada distrito, en los que vecinas y vecinos aportarán sus miradas para dotar a las iniciativas de perspectivas sobre convivencia barrial, accesibilidad, sustentabilidad y género.
La agenda continuará con encuentros en el CMD Norte, el miércoles 29 a las 17.30; y el CMD Noroeste, el jueves 30 a las 17. La siguiente semana será el turno del CMD Sur, el lunes 4 de julio a las 17.30; del CMD Centro, el martes 5 a las 17; y por último del CMD Sudoeste, el miércoles 6 a las 17.30.
Durante los últimos dos años, más de 8.000 vecinas y vecinos de 600 puntos de la ciudad participaron de diversas instancias territoriales de participación ciudadana como los casa por casa, operativos barriales, consejos barriales, consultas ciudadanas y laboratorios de «acupuntura ciudadana», entre otros. Allí volcaron sus opiniones y miradas respecto a las acciones a priorizar en sus barrios.
Según estas opiniones, el 88% de las propuestas atienden a temas urbanos, es decir mantenimiento, higiene, obra pública y movilidad, y un 12% propuso abordar problemáticas sociales. Con esa información, el municipio creó un banco de ideas que fue tomado de base por las secretarías para confeccionar los 52 proyectos.
La subsecretaria de Vinculación Ciudadana, Laura Bartolacci, valoró el banco de ideas creado en base a las prioridades de la ciudadanía. “No se requiere de una instancia exclusiva de diseño de proyectos aleatorios y parciales ya que las secretarías cuentan con datos e insumos concretos aportados por miles de vecinos que garantizan una representatividad territorial y temática”, señaló. “A partir de allí -amplió- se proponen proyectos por distrito que integren y contemplen las propuestas vecinales con el plan de gestión del municipio”.
El objetivo de los laboratorios que se inician ahora es enriquecer los proyectos con las miradas de referentes de organizaciones de la sociedad civil; líderes de la ciudad, coordinadores territoriales, vecinos en general y estudiantes universitarios a través de ideas y propuestas a partir de cinco ejes: Cambio climático y ciudades resilientes, Ciudades que incluyen y cuidan, Movilidad y Urbanismo, Convivencia y Cultura de paz, y Transformación Digital.
Luego de los Laboratorios Ciudadanos, los 52 proyectos serán puestos nuevamente a consideración de la ciudadanía, que priorizará seis de ellos, uno por cada distrito, para ser ejecutados por el municipio durante el primer semestre de 2023, con un presupuesto aproximado de 1.200 millones de pesos. El resto de las iniciativas quedará a disposición del Gabinete Urbano para ser consideradas en instancias posteriores.
Con esta nueva modalidad, retornará el Presupuesto Participativo luego de la pandemia. “En el último tiempo, la herramienta presentó algunas dificultades propias del desgaste de tantos años, sumado a los cambios vertiginosos en materia de tecnología y, consecuentemente, la forma de participar y vincularnos”, indicó Bartolacci.
En ese sentido, la funcionaria destacó que se apuntó a “integrar las múltiples identidades y miradas que habitan nuestra ciudad, diseñando y tomando decisiones ancladas en los vecinos y su territorio para asegurar la máxima representatividad de cada rincón de la ciudad, sin intermediarios, visitando puerta a puerta sus casas, llevando Operativos Barriales que mejoren situaciones y reclamos, identificando y destrabando barreras, sentando a la mesa a todos los actores, incluso a los que se encuentran decepcionados o nunca se han acercado”.