Con el Paraná en 5,45 metros en la zona costera de Puerto Vilelas, las familias que permanecían evacuadas empiezan a regresar a sus casas. El intendente de la localidad, Víctor Rea, comentó que muchos de los vecinos se encuentran en este momento en la tarea de “poder recuperar algo de lo que quedó”. “Estamos contentos porque medianamente esta vuelta hace que puedan cuidar sus cosas, que es la preocupación máxima que tiene todos”, sostuvo.

Casi 600 familias fueron afectadas en Puerto Vilelas por la crecida del Paraná que se dio de manera repentina y que no dio tregua a la organización en cada hogar. “Al ser Vilelas una localidad costera y de muchos parajes en la zona cerca del río, hizo que ni bien empezó a subir nos quedáramos con vecinos aislados. La cantidad de vecinos, entre evacuados y autoevacuados, hizo que se complicara muchísimo”, afirmó.

“Con estos números que nos está dando el río y si tenemos una semanita de sol y nos acompaña un poco el clima, creemos que van a estar volviendo todas. Es positiva la situación en este momento”, apuntó.

Sí recalcó y puso énfasis en la necesidad de tomarse todos los recaudos por la aparición víboras, alacranes y otras alimañeras que generalmente se refugian en las casas, “se meten en las rendijas, en los roperos, en los techos, en los rincones. Hay que tener mucho cuidado ahora y lo primero es la limpieza con mucho cuidado y precaución”.

Hoy, la asistencia consiste no solo en materiales necesarios para la reconstrucción, con los equipos municipales disponibles las 24 horas al servicio de la comunidad.