La Municipalidad de Córdoba, a través de la Dirección de Acompañamiento y Apoyo al Inmigrante de la Secretaría de Planeamiento, Modernización y Relaciones Internacionales, junto a FIDE incubadora de empresas y la Agencia de la ONU para los refugiados ACNUR, presentaron los resultados del programa “Inserción Laboral en la ciudad de Córdoba para Personas Refugiadas y Migrantes”, y lanzaron la segunda edición.

En ese marco , Alejandra Torres, Secretaria de Planeamiento, Modernización y Relaciones Internacionales de la Municipalidad de Córdoba y presidenta de la FIDE, agradeció a todas las personas que hicieron posible el programa, felicitó a los participantes por su constancia, perseverancia y por la confianza puesta en las distintas instancias de este proyecto y aseguró: “Cuando uno quiere salir adelante, se puede, pero se puede con trabajo, con sacrificio. Desearía que ustedes sean la voz de toda una Córdoba que se levanta y dice: salgamos adelante con trabajo, sacrificio y menos burocracia”.

También, aprovechó para invitar a las empresas que aún no se sumaron al proyecto a participar de la segunda fase, para dar la oportunidad de inserción a las personas que por causas de fuerza mayor deben abandonar sus países de origen y eligen la ciudad de Córdoba para de desarrollarse y aportar a nuestra economía, a nuestra sociedad, y enriquecen el intercambio cultural.

El objetivo del programa es favorecer la inserción laboral de las personas refugiadas en nuestra la ciudad a través de dos ejes: La concreción de experiencias profesionales y el fortalecimiento para emprendimientos.

De este modo, la primera etapa concretó 15 experiencias laborales en distintas empresas de nuestra ciudad, con las que se reforzó la empleabilidad de las personas refugiadas y migrantes en la ciudad de Córdoba, promoviendo su acceso a empleos calificados.

A la vez, se les brindó una oportunidad para confirmar sus capacidades, adquirir nuevos conocimientos, desarrollar nuevos vínculos profesionales e incorporar nuevas referencias laborales locales a sus currículums.

Estas 15 prácticas profesionales rentadas se llevaron a cabo en 14 empresas que integran la incubadora de empresas del Municipio (FIDE), UNC y UTN, por lo que las empresas locales tuvieron la oportunidad de incorporar talentos internacionales a sus equipos, sin costo alguno.

Las prácticas tuvieron una duración de cinco meses y una carga horaria de 25 horas semanales, otorgándole a cada beneficiario una asignación estímulo mensual, un seguro de accidentes personales y una cobertura de salud.

Las empresas que recibieron a los profesionales refugiados han sido incubadas en FIDE, como Micro 3D (desarrollo de micro-dispositivos para fecundación in vitro por impresión 3D); Consultora Gestalt (capacitadora de talento humano) y HDS Technology SRL (soluciones de integración mecánica).

Alejandro Guidovaldi de MICRO 3D, uno de los empresarios que participaron en la primera parte del proyecto dieron testimonio de cómo les resultó participar, colaborar, recibir y dar en esta vinculación con migrantes refugiados que viven en nuestra ciudad “Aliento a las distintas empresas a que se acerquen porque el programa es muy accesible, muy fácil desde lo burocrático que es lo que siempre de alguna manera nos frena a emprender en estas tareas. FIDE se encargó de toda la parte administrativa, nosotros solamente tuvimos que presentar una carta de intención y con eso Ajmer, que es palestino, ya estaba con nosotros trabajando”. Y añadió: “Es uno de los pocos programas en los cuales uno realmente tiene que tener solamente la voluntad, porque después del resto se ocupa la gente que está encargada”.

Es importante destacar que de los 15 pasantes, tres de ellos continuarán trabajando en la empresa que les dio la primera oportunidad.

Tal es el caso de Nurly de Venezuela, quien se desempeñó durante cinco meses en la Consultora Gestalt. Marlene, parte del equipo expresó al respecto: “Tuvimos a Nurli trabajando con nosotros durante cinco meses y fue una experiencia enriquecedora para ambos. Para ella, porque pudo volver a trabajar con algo vinculado a su formación profesional y por nuestra parte porque incorporamos un gran valor a nuestro equipo, que nos acompañó y se adaptó de manera fabulosa”, y añadió: “Finalizados estos meses, le hicimos una oferta formal para que se sume a nuestro equipo y continuar con la misma carga horaria que hizo durante el programa y la acepto.
Así que, estamos muy contentos de seguir trabajando con ella porque se ha alineado muy bien a nuestra cultura y a nuestros valores”.

También, y dentro del programa se les otorgó apoyo a 15 emprendimientos, en su mayoría del sector gastronómico, servicios de estética, serigrafía e indumentaria textil.

De este modo, se vieron fortalecidos y se formalizó a diferentes emprendimientos de personas refugiadas y migrantes.

El programa, brindó seguimientos individualizados de cada uno de los proyectos, otorgándoles una capital semilla por emprendimiento y capacitándolos en herramientas para emprender y comercializar sus productos.

Además, y de forma paralela se brindó un ciclo de capacitaciones complementarias a las personas que estaban realizando las prácticas profesionales, ampliándose a personas refugiadas que no formaban parte del mismo, logrando la participación de alrededor de 40 personas.

Las temáticas sobre las que se instruyó fueron: el aprendizaje en un contexto laboral cambiante, trabajar con sentido y propósito; gestión del estado de ánimo en el ámbito laboral; y sobre la importancia de comunicar efectivamente para la inserción laboral.

Próximamente comenzará la segunda edición del programa, con un cupo de hasta 12 profesionales y 12 emprendimientos. Por lo que se invita a todas las personas refugiadas y migrantes mayores de 18 años, interesadas en participar a inscribirse a través del correo [email protected]