La ministra de Seguridad de Javier Milei, Patricia Bullrich, hizo acusaciones maliciosas, absolutamente falsas y con una clara intencionalidad política en relación con la actuación del Municipio de La Matanza en una problemática de honda conmoción social como son las tomas de tierra.
La verdadera pasividad ante las tomas de tierra fue de Bullrich, Ritondo, Macri y Vidal
Lo hizo, además, buscando sacar un rédito ideológico a dos días de la trágica muerte de cinco personas e ignorando su responsabilidad por su inacción en algunas ocupaciones clandestinas de predios, ocurridas en nuestro distrito durante su actuación como ministra de Seguridad de Mauricio Macri.
Bullrich falta a la verdad de un modo alarmante y lo hace para esconder aquellos hechos de público conocimiento ocurridos en La Matanza.
En efecto, sucedieron algunas usurpaciones de terrenos entre 2016 y 2019 en nuestra comuna con Bullrich a cargo de la seguridad del gobierno de Macri, cuando eligió no actuar, en una absoluta sintonía con su par de la Provincia de Buenos Aires, Cristian Ritondo, quien, así como ella seguía las indicaciones de Macri, respondía a la conducción política de la gobernadora María Eugenia Vidal.
Como parte del castigo al que el macrismo sometió a los vecinos de La Matanza por no haberlo votado, nunca en ninguno de esos episodios Bullrich mandó a las fuerzas federales para que intervinieran frente a la inacción de la policía bonaerense de aquel momento, a la que Ritondo y Vidal mantenían inmovilizada, pese a las denuncias y reclamos realizados en todos los casos en tiempo y forma por nuestro municipio y los vecinos.
La mayoría de aquellas ocupaciones clandestinas en La Matanza durante el macri-vidalismo tuvo una característica llamativa: fueron llevadas adelante por vecinos de CABA que se trasladaron para usurpar tierras en nuestra comuna, como quedó claramente establecido en las actuaciones judiciales.
Y en la gran mayoría de esas usurpaciones Ritondo y Bullrich se quedaron de brazos cruzados (uno, incumpliendo con la actuación policial; otra, no respondiendo con las fuerzas federales) siguiendo las directivas políticas de la gobernadora y del presidente.
La ministra Patricia Bullrich miente, por que el secretario de Seguridad de La Matanza es el doctor Eduardo Barcat, un prestigioso profesional que proviene de la Justicia con una carrera intachable, doctorado en Ciencias Jurídicas, profesor universitario y especialista en derecho público y seguridad.
Promover este tipo de politiquería barata frente al dolor de las familias que sufrieron las pérdidas de seres queridos califica a quien lo hace.
En La Matanza nada ni nadie impedirá que sigamos trabajando por el bienestar de nuestras vecinas y vecinos.
La verdad nunca puede ser ocultada por una mentira. El Papa Francisco expuso con sabiduría las consecuencias de lo contrario cuando dijo: «Vivir de comunicaciones que no son auténticas es grave, porque impide las relaciones y, por lo tanto, el amor. Donde hay mentira no hay amor. No puede haber amor». El amor siempre va a vencer al odio.