Con la apertura de sobres para la segunda etapa de obras de la defensa del Barrio San Pedro Pescador y un avance de 78% de la primera etapa, el Gobierno provincial da respuesta a una necesidad histórica de la comunidad costera. Con la concreción de 650 metros de defensa, el Estado garantiza, además, mayor seguridad y calidad de vida a los más de 1.100 habitantes de la zona ante los embates del río Paraná sobre la costa chaqueña.

Vale recordar que el Barrio San Pedro Pescador es una localidad de la provincia del Chaco, Argentina, ubicada sobre el delgado albardón costero del río Paraná. La localidad se encuentra en el departamento Primero de Mayo y depende administrativamente del municipio de Colonia Benítez

Una empresa se presentó como oferente en la apertura de sobres del llamado a licitación 01/23 para la segunda etapa del proyecto planteado a través de la Administración Provincial del Agua. Se trata de la empresa GINSA SA – ARCA SA – UT que contará con un presupuesto de $542.959.640, para la ejecución de la obra estratégica que impactará de manera positiva en la vida de pescadores y lugareños.

Al respecto, el Gobernador anticipó que “el proyecto final contará además con una senda peatonal para circulación y recreación de los vecinos”, recordando que esta obra con carácter de reparación histórica forma parte del plan de intervenciones ejecutadas en el barrio, como la red de agua potable, el centro de salud, el jardín de infantes, escuelas primaria y secundaria; así como lo que serán las viviendas para la relocalización familias de la zona.

Primera etapa

La primera etapa de la defensa alcanza casi el 80% de ejecución, protegiendo al barrio y sus habitantes de los embates de las corrientes del río Paraná sobre la costa, garantizando el desenvolvimiento de sus actividades diarias con mayor seguridad y elevando sustancialmente su calidad de vida.

De este modo, la defensa Norte representó una inversión de 522 millones de pesos financiados con fondos nacionales, contemplando la construcción, a lo largo de 350 metros de extensión sobre la costa, con un sistema de mantas flexibles que funcionan como mecanismo de protección ante la erosión generada por el oleaje de las líneas de corrientes del río Paraná.

Segunda etapa

La segunda etapa, que comenzará a ejecutarse en marzo, contempla un nuevo tramo de 300 metros hasta llegar al puente General Belgrano, que incluye la ejecución de un sistema de desagües pluviales. Para ello, y con un presupuesto de $542.959.640, la empresa oferente presentó un proyecto “superador” y con modificaciones en el original.

También incluye la construcción de 6.000 metros cuadrados de protección mediante un sistema de mantas flexibles compuestas por geotextiles no tejidos y tejidos que se complementan con bloques de hormigón. Este sistema contempla la construcción de un sistema de anclaje compuesto por una viga de coronamiento, pilotes, tensores y pantallas de anclaje.

Se aprovecha un muelle existente, y se lo protege con gaviones cilíndricos con el objeto de conformar el cuarto espigón con el que cuenta la obra. Además, se construirán 150 metros de desagües pluviales para encauzar los excesos hídricos y un terraplén de cierre en el sector Sur.