Reino y Barrera compartieron sus inquietudes y expresaron su preocupación ante la posibilidad de que, a través de la Ley Ómnibus que está siendo tratada en el Congreso de la Nación, sea eliminado el subsidio a las zonas frías. Ambos jefes comunales coincidieron en la importancia de abordar este desafío con responsabilidad, considerando sus repercusiones en los bolsillos de las familias sobre todo en el próximo invierno cuando el gobierno avance con la suba de tarifas y la quita de los subsidios.

Una vez que la norma sea aprobada –en caso de que lo sea- los usuarios residenciales del Sudoeste Bonaerense volverán a pagar el precio pleno del gas, sin los descuentos del 30 % y el 50 % que hoy se están aplicando en el ítem que refiere al gas consumido.

Gustavo Barrera señaló: «Tenemos la misma preocupación que los vecinos con respecto al artículo 292 del DNU que deroga las leyes de zona fría y el aumento de las facturas que, sumados a la actualización de los precios, impactarían de lleno en cada familia. También nos preocupa mucho la salud pública y los costos que están teniendo incrementos día a día».

Esteban Reino agregó que, pese a la diferencia de partidos políticos, es fundamental que todos los intendentes trabajemos de manera colaborativa en diferentes los frentes: «El dinero que recibimos sigue siendo el mismo que el año pasado y la inflación ha licuado ese número. Tenemos los mismos recursos y la demanda aumenta, por ello tenemos que trabajar, al menos regionalmente, para ver cómo costear los nuevos montos. Vemos con gran preocupación los medicamentos que han incrementado, en algunos casos, hasta un 800%».

Ambos intendentes coincidieron en la necesidad de encontrar soluciones efectivas y trabajar en conjunto para mitigar el impacto de los posibles aumentos en los servicios básicos para sus comunidades.