Los diaguitas habitaron San Juan en la primera mitad del milenio de la historia. Allá por el año 400, los pueblos originarios asentados en esta provincia se caracterizaban por el uso de metales y alfarería, muchos de los cuales fueron descubiertos cientos de siglos después. Jáchal guarda parte de esa riqueza histórica-cultural y es por eso que una familia decidió apostar a la historia para atraer el turismo y educar.

La familia Pombo vive en una zona cercana a La Ciénaga y actualmente son dueños de la estancia Agua Arriba. Allí empezaron a soñar con un proyecto que cada vez lo ven más cercano y posible. Se trata de la creación del Parque Temático Los Cauquenes, una idea que ya cuenta con el apoyo de la Ley de Mecenazgo 2023 y que rescatará y recreará la historia de los primeros humanos que habitaron las tierras sanjuaninas.

«Esto comenzó por el pueblito cercano de La Ciénega. En algún momento los pobladores nos buscaron para ver qué se podía hacer para que la gente no se fuera del lugar. Vimos el tema del turismo y se empezó a trabajar para lograr el agua potable que es elemental para arrancar con el turismo», comenzó recordando Roberto Pombo, dueño del lugar, a Diario La Provincia SJ.

En aquellas tierras se realizaron, por más de 10 años, distintas exploraciones e investigaciones en las cuales se descubrió un sector que pertenecía a un cementerio aborigen, dado que se encontraron urnas con huesitos, y restos de otras urnas que se usaban para los rituales de entierros. También aparecieron restos de vasijas que pertenecían a las chozas y al común desarrollo de la vida que tenían los aborígenes e inclusive marcas de aquellas viviendas de antaño. En varios sectores de la zona explorada se encontraron nacederos lo que indica que fue uno de los motivos por los cuales pudieron desarrollar su vida en esos sectores.

«La propiedad es bastante extensa y hay de todo, desde vertederos de agua natural hasta un paisaje hermoso. A un kilómetro y medio de donde estamos están las huellas de los dinosaurios. Geológicamente y paleontológicamente es muy importante para desarrollar», explicó.

Algunas de las personas que estuvieron investigando en la zona fue la antropóloga Nani Varela y se le consultó a la arquitecta Blanco por la preservación de las piezas encontradas. Además, para desarrollar el proyecto pensándolo como Parque Temático se consultó a la profesora de educación física, Susana Ferrer.

Encabezado por Matías Pombo, ideólogo del proyecto, se trabajó en la idea de Parque Temático como un lugar que pueda mostrarle a las personas, a través de un recorrido que cuide cada una de las piezas, el lugar dónde vivían los antepasados. Además se planteó mostrar cómo lo hacían, resaltando la importancia histórica, geológica y paleontológica de la zona.

En la Estancia Agua Arriba se ubicará todo el proyecto. Allí hay un sector dedicada a la parte del acampado y es una zona donde ya se han reproducido las chozas donde vivían los huarpes a manera de atracción turística. «Desde Patrimonio nos dijeron que las chozas originales de caña y barro podían tener algún accidente. Era mejor hacerla de una réplica de material para que fuera más seguro y en eso vamos a trabajar ahora», agregó Roberto Pombo aclarando que donde están construyendo no quisieron modificar la geografía para conservar todo como era el lugar, ya que han encontrado sobre la tierra «pedazos de vasijas y jarrones de distintas épocas».

Todo el circuito va a tener caminos que ellos van a diseñar y construir para que a futuro puedan circular los turistas con un guía. En un principio todo va a estar diseñado con la temática de los aborígenes pero no descartan a futuro incorporar otros puntos que hacen a la historia.

«La idea es hacer todo lo más pronto posible con lo más elemental. Es un proyecto que no tiene un fin. Lo vamos a arrancar con lo mínimo, para circular con la gente y continuar desarrollándolo», finalizó con la mirada puesta en el 2024.