La Municipalidad de Merlo, en una firme medida de transparencia y compromiso ético, anunció que todos los funcionarios públicos y cargos electivos, deberán someterse a un examen toxicológico. Asimismo, como medida inicial se ha establecido la obligatoriedad para que dentro de 15 días Intendente y concejales hagan el narcotest para luego hacer extensivos los efectos a funcionarios y Juez de Faltas.

Esta iniciativa, plasmada en el Decreto N° 29 y alineada con la Ordenanza vigente, marca un paso significativo en la gestión pública al exigir que quienes ocupan cargos de responsabilidad rindan cuentas también en lo personal. Al respecto, el intendente Álvarez Pinto afirma públicamente que no ha consumido drogas en su vida y desafía a los concejales de la oposición a obtener resultados negativos, destacando la importancia de una transparencia que supere cualquier declaración y pueda demostrarse con hechos.

El decreto estipula que cada funcionario, en ejercicio de un compromiso ético con la comunidad, deberá realizarse este examen sin costo alguno para el Estado, financiándolo personalmente. La medida pretende reforzar la confianza pública y actuar como un modelo de coherencia en la lucha contra el narcotráfico y el consumo de sustancias ilegales, considerando que el rol de los representantes públicos es ofrecer ejemplo y liderar con transparencia en todas las áreas.

Este primer examen tiene como fin inicial garantizar que quienes representan a la ciudadanía demuestren su responsabilidad también en la esfera personal, promoviendo una conducta ejemplar en la administración pública. Con esta acción, la Municipalidad de Merlo establece un precedente en el compromiso con la integridad institucional, y se espera que esta política sea un elemento de inspiración para otras jurisdicciones y organismos gubernamentales