En ese sentido, en la ciudad aumenta de manera escalonada la red de sectores habilitados para la clasificación de residuos. En él, los vecinos pueden acercarse a depositar escombros, maderas, colchones en desuso, electrodomésticos en mal estado, neumáticos, entre otros.

El objetivo primordial de estos centros de recepción apuntan a desalentar los microbasurales que habitualmente se producen en diversos sectores, a fin de evitar fuentes de proliferación de distintos agentes transmisores de enfermedades.

Este Punto Limpio tendrá las instalaciones apropiadas para el acopio de desechos de grandes dimensiones que no pueden ser colocados en los contenedores destinados a los residuos de menor porte denominados domiciliarios. Por ello, es que reemplazará al del barrio Santa Cecilia.

Asimismo cada vecino, al disponer su material reciclable, inicia un proceso de varios pasos que logra convertir esos elementos en materia prima para otro producto nuevo. En esa línea, se fortalece la gestión social del sistema de reciclado y con la meta en que, al separar los desechos en sus hogares, se multipliquen la cantidad de materiales recuperados y evitar que terminen en el relleno sanitario.

Las autoridades municipales han subrayado que a medida que la comunidad se suma en la respuesta a los desafíos medioambientales, el Punto Limpio se consolida como una solución efectiva en la gestión de residuos. Su enfoque se orienta hacia la creación de un entorno más limpio y saludable, que será heredado por las generaciones venideras.